Los cotilleos de lady Whistledown no fallan nunca: una vez más, Anthony Bridgerton es el soltero más codiciado de la temporada en la alta sociedad victoriana. Pero este año, el atractivo vizconde, amante de la diversión y enemigo del compromiso, sorprende a todos y decide buscar esposa y sentar cabeza. La joya más preciada, la joven y hermosa Edwina Sheffield, es su elección natural. Pero para conseguirla ha de obtener antes la aprobación de la hermana mayor de la muchacha, Kate. Anthony comprobará que convencer a esa mujer arrogante y decidida de que ha dejado de ser un vividor no es tarea fácil. Como tampoco lo es quitársela de la cabeza cuando llega la noche.
ESTABA DECIDIDA A PROTEGER EL CORAZÓN DE SU HERMANA...
Kate siempre supo que el éxito en sociedad no era para ella: pensaba que era demasiado alta, algo mayor para el matrimonio a sus veintiún años, y no especialmente bella. Por eso se dedica en cuerpo y alma a proteger a su adorable hermana pequeña de todos los vividores sin escrúpulos que la rondan en bailes y reuniones, atraídos por su belleza. Kate se siente más que capaz de mantener a raya a solteros de dudosa fama como el vizconde Anthony Bridgerton... aunque pronto descubrirá que del enfrentamiento a la pasión hay un paso muy pequeño.
¿PERO QUIÉN PROTEGERÍA EL SUYO PROPIO?
Anthony Bridgerton tenía clara una cosa en su vida: que no viviría más años que los que vivió su padre, muerto antes de los cuarenta. Por eso ha decidido vivir su juventud intensamente, sin comprometerse a un amor que quedaría bruscamente interrumpido. Sin embargo, llega un momento en que decide casarse para dejar un heredero. Pero encuentra un formidable obstáculo, la persistente hermana de la novia elegida, que se atreve a desafiarle continuamente. Poco a poco, Anthony descubre en aquella mujer un rival digno de él mismo, capaz de hacerle replantearse muchas cosas... y un ser excepcional del que le va ser muy difícil no acabar enamorado.
Seguramente cuando veas esta entrada, pensarás que la fiebre de Netflix me ha terminado por desbordar y me ha hecho caer con los Bridgerton, enamorada de lo que nos han ido mostrando. Mi sentido de la honestidad, me obliga a decirte que algo de razón tienes, esperaba esta serie como agua de mayo, para irla disfrutando conforme leía y
veía, el problema es que la serie no me ha llenado, y por el contrario, mi contacto con la autora y con dos libros que pertenecen a esta y a la siguiente serie hermana de esta familia, me tienen cautivada, y por tanto, me sentí en la necesidad de leer de forma continua y sin perdida de tiempo a EL VIZCONDE QUE ME AMÓ.
veía, el problema es que la serie no me ha llenado, y por el contrario, mi contacto con la autora y con dos libros que pertenecen a esta y a la siguiente serie hermana de esta familia, me tienen cautivada, y por tanto, me sentí en la necesidad de leer de forma continua y sin perdida de tiempo a EL VIZCONDE QUE ME AMÓ.
Se que llegados a este punto, no hay alma que sepa que esta obra es pare de una saga de números independientes, que el hilo conductor común es ver a la familia, que es de género
romántico histórico victoriano, y en este punto, por si alguna alma dispersa como yo no lo sabe, a pesar de no ser una comedia, siempre encontrarás un gratificante e inteligente sentido del humor en cada pareja, como por ejemplo la de hoy, que no tiene desperdicio.
romántico histórico victoriano, y en este punto, por si alguna alma dispersa como yo no lo sabe, a pesar de no ser una comedia, siempre encontrarás un gratificante e inteligente sentido del humor en cada pareja, como por ejemplo la de hoy, que no tiene desperdicio.
Anthony Bridgerton, el cabeza de familia de esta formidable familia, ha decidido por fin sentar cabeza, pero lo hará bajo sus condiciones. Es un hombre "pragmático", su deber de continuar la progenie es algo indudable, su amor y fervor por su familia es parte de su estandarte, por lo tanto, sabe lo que tiene que hacer. Es un personaje que tiene muchos sinos, pero dentro de todo, sabe conquistar desde la primera página, pero lo hará sobre todo, cuando se vea obligado a luchar contra sí mismo, contra sus decisiones que rara vez cambia y ante la única mujer que es capaz de plantar cara y no caer ante ese encanto descarado y seductor que tan mala fama le ha dado y tantas satisfacciones con las damas ha disfrutado.
Kate adora a su familia y sabe que ella no es precisamente una belleza despampanante como su hermana menor. Su cariño la hace ser la custodia del corazón de aquella que puede salvarla a ella y a su madrastra de vivir en la calle. Consiente de todo lo que debe ser, Kate sabe sin lugar a dudas que su hermana ante todo merece ser feliz. Y es aquí donde nos encontramos a una chica que bajo ninguna circunstancia es capaz de sentir celos o envidia ante la más bella de las hermanas, todo lo contrario. Es una mujer tenaz, fuerte, decidida, que su carta de presentación es ella misma en donde sea que deba ser y
si tiene que plantar cara y una guerra directa contra un calavera que ha puesto los ojos en uno de sus grandes tesoros, no dudará en luchar como campeona, aunque eso quizá la ponga en peligro de algo más que de caer en esa batalla.
si tiene que plantar cara y una guerra directa contra un calavera que ha puesto los ojos en uno de sus grandes tesoros, no dudará en luchar como campeona, aunque eso quizá la ponga en peligro de algo más que de caer en esa batalla.
La guerra de voluntades y de dos titanes está puesta, las delicias que se disfrutaran de
EL VIZCONDE QUE ME AMÓ, serán servidas desde un inicio, ya no contando con dos protagonistas que no pierden fuelle, todo lo contrario, y por otro lado, el elenco que se va haciendo más presente y cautivando la atención sin poder remediarlo. Momentos graciosos, otros que marcan la historia dejando claro que nuestros personajes son humanos, imperfectos, pero que juntos son imparables. Ternura, es parte de las cosas que me encontré y que me ha dejado claro, que necesito continuar con lo que viene, que estoy segura es para servirse en plato de oro y disfrutar cucharada a cucharada.
EL VIZCONDE QUE ME AMÓ, serán servidas desde un inicio, ya no contando con dos protagonistas que no pierden fuelle, todo lo contrario, y por otro lado, el elenco que se va haciendo más presente y cautivando la atención sin poder remediarlo. Momentos graciosos, otros que marcan la historia dejando claro que nuestros personajes son humanos, imperfectos, pero que juntos son imparables. Ternura, es parte de las cosas que me encontré y que me ha dejado claro, que necesito continuar con lo que viene, que estoy segura es para servirse en plato de oro y disfrutar cucharada a cucharada.
Está claro que estoy enamorada de la pluma de Julia Quinn, y quizá eso me hubiese gustado encontrar en la serie. En este punto no planeo entrar en debate. Para mi el sentido del humor que la autora ha impregnado en cada personaje, Violet, la matricarca, nuestro vizconde son cosas que hacen de esta obra simplemente maravillosas y por supuesto, que me alientan para mantener a esta autora entre las grandes Divas de la regencia. ¡Feliz lectura!