El día que Lukas se cruzó en la vida de Mónica ella pensó que no era más que un chulo, engreído, demasiado desaliñado y seguro de sí mismo. Y Lukas que Mónica era una mosquita muerta, remilgada, estiradilla y con un flequillo espantoso. Lo que ninguno imaginó era que, a pesar de aquella primera y nefasta impresión, ambos se verían obligados a compartir piso, convivir, y asumir lo que aquella convivencia traería a sus vidas.
No hay más ciego que el que no quiere ver, y los dos han decidido ponerse durante largo tiempo una venda enorme en los ojos. Pero sus locos amigos, unos caseros excéntricos y alguna que otra sorpresa, les obligarán a hacerlo, poniéndolos a prueba. ¿Conseguirán salir airosos?
No es sorpresa ver a ciertas autoras que son para mi un vicio. Una de ellas es Lorraine Cocó que repite varias veces al año y que , en verdad, no dejo de recomendar, sobre
todo cuando buscas pasar un rato agradable, desconectar y sonreír.
El día de hoy te traigo una de esas historias, pues vamos a hablar de JUGANDO A LAS CASITAS. Estamos ante una obra autopublicada y autoconclusiva de romance contemporáneo, narrada en tercera persona.
Quiero hablarte de Mónica, que aunque en realidad no es que fuese totalmente santo de mi devoción (pues no todo mundo nos tiene que caer del todo bien), es una chica que se
ha hecho a sí misma, que ha vivido una situación que la hace estar "temerosa" de entregar el corazón y confiar en alguien. Pese a eso, es una chica que aunque le cuesta afrontar cierta situación, también se entrega a manos llenas.
Lukas, es otra cosa, pero es que este hombre rebosa encanto y a mi me tuvo en la mano desde el momento uno. Un tanto descarado, canalla por momentos, es ese amigo que toda chica quiere, que te escucha y te lee y además, que te hace latir el corazón. Se puede equivocar, pero una vez que da el paso lo hace con todo y eso.. eso me ha matado.
Debo decir que hay obras que quizá no necesitan mucha profundidad, para hacerte
pasarlo bien. Dos almas que se autoengañan, un momento de inspiración para conservar lo que se quiere, la sangre hirviendo por revelar la verdad y tendemos una evolución clara de dos corazones latiendo al unísono. Para mi hace de esta obra que es sencilla, ya que no hay misterio ni nada en especial, sin ser lineal, te entrega una bonita historia de amor para entretenerte en un momento de urgente desconexión y lo logra a las mil maravillas JUGANDO A LAS CASITAS.
No puedo alabar más el trabajo de Lorraine Cocó, es una pluma que a mi me conquista. Su pluma sabe darme lo que necesito y a veces son solo momentos para solo pasar el rato. ¡Feliz lectura!